La cuarta de Enrique VIII fue Ana de Cleves (sabemos que nos hemos saltado Jane Seymour).


Ana de Cleves era alemana, hija de los duques de Clevery.
Como en el siglo XVI no habia hotmail, ni msn, ni mucho menos webcam, utlilizaron sus recursos para hacer llegar un retrato de Ana a Enrique, es decir, de Alemania a Inglaterra.
Lo que vendria a ser un genio del photoshop en esa epoca era Hans Holbein el joven (ya que era "subdito del duque de Clevery pues hacía "favores" a los duques), luego entonces no os fieis de lo que vuestros ojos ven en el cuadro, pues Ana era en realidad todo lo opuesto al retrato de arriba. La chica era un autentico cardo borriquero, era corpulenta, con marcas de la viruela en su rostro alargado y caballuno (era apodada "la yegua de Flandes").

Enrique, como persona que era y mujeriego, al ver el bonito retrato de Ana, aceptó casarse con ella.
Lo bueno fue cuando la vió en directo (imaginaos la cara que puso Enrique); igualmente su matrimonio siguió adelante aunque solo duro del 6 de enero al 9 de julio, y ni siquiera se llegó a consumar.

Pero Ana siguió siendo, después del divorcio, amiga de Enrique.
I aún siendo la mas fea de todas las esposas fue la última en morir (por causas naturales).